18 octubre 2006

Lurín y la ayuda humanitaria

Esta mañana contacté con Global Humanitaria, una ONG con la que mi prima María tiene amadrinada una niña. Me fueron a recoger al hostal, y en una hora estabamos en Lurín. Gustavo, de la ONG me fué explicando por el camino el trabajo que hacen, muy interesante. Aportan ayuda alimentaria, escolar y sanitaria, básico en la vida de los niños, y de lo que carecían. Muchos niños han sufrido desnutrición, y con ellos enfermedades y un desarrollo deficiente, y la ONG trabaja en erradicar esto, y en educar y concienciar a las familias.
Al llegar a Lurín te encuentras con cerros frente al mar, un bonito sitio para una urbanización, pero no, esto no es eso. Aquí la luz llegó hace poco, y no a todos los sitios. No hay agua corriente ni alcantarillado. Tienen letrinas y viven en "casas" que nosotros llamamos chabolas, con madera, cartones... los más afortunados tejados de uralita metálica.
Noemí es la niña que amadrina mi prima. Vive en San José de Lurín, y su familia es encantadora, concienciada con la importancia de la educación, y colaboradores con la ONG desde su humilde casa, llena de amor y respeto. Aquí son un modelo a seguir, pues otras familias no tienen la suerte de estar unidas, por desgracia. A mi me trataron como un rey, y me invitaron a comer, cosa que acepte encantado. El lugar es muy pobre, pero el trato amable compensa las carencias que tiene la casa. Tuvimos una conversación muy agradable y variada, y la niña me enseñó sus trabajos en el cole, además de ser la mejor de su pueblo con un instrumento tradicional: la zampoña. He disfrutado muchísimo con esta experiencia, me he sentido un privilegiado, y si, estoy hablando de comer en una chabola con gente muy pobre, pero son ricos en otras cosas, y todos debemos aprender a valorar lo que tenemos alrededor, pues esta gente sin tener nada te regala sonrisas y cariño, que son gratis y a veces lo olvidamos.
Tengo dos contactos en la agenda por si algún día siento la necesidad de regresar aquí para otra aventura: colaborar con la ONG para ayudarles en su trabajo y seguir aprendiendo. Y otra cosa, he visto con mis propios ojos que el dinero llega, lo cual es gratificante.

17 octubre 2006

El regreso a Lima

Ayer volví a Lima, después de 20 horas metido en un bus, cansado pero satisfecho. He cumplido todos los planes que hice del viaje. Me he vuelto a alojar en la Casa del Mochilero, en Miraflores, donde me trataron muy bien, y esta vez me recibieron con un abrazo. Esta ya es como mi casa en Perú, jeje. En Miraflores ya ando de memoria, muy cómodo.
El día lo dediqué a hacer llamadas y concretar el asunto de la ONG, para ver a una niña que mi prima María tiene amadrinada aquí. Todavía estoy a la espera...
Por la tarde me fuide compras, y ya tengo muchos regalitos, solo que pequeños, porque lo grande no lo puedo llevar, con toda la pena, pues hay cerámicas preciosas y tejidos de mil modelos. También muchas joyas de plata, pero esas no las llevo por las pelas. No son caras, la verdad, pero estoy al final del viaje, ya con lo justo.
Por la noche me reencontré con Fiore, y fuimos a un mercado gigante llamado Polvos Azules, no me digas porqué. El caso es que allí hay de todo, y muy barato, casi tirado. Me compré una mochila enorme por 10 euros, una colonia de marca por 9, y un doble CD por 1. No hace falta decir que casi todo es falso, pero la policia hace la vista gorda, incluso vigila la zona.
Luego cenamos y me fuí a descansar. He dormido de lujo. Estaba destrozado del viaje, y se notó. Ahora he estado paseando y desayunando frente al mar, ya despidiendome. Me queda poco aquí, y lo pienso aprovechar.

15 octubre 2006

Despidiendo Puno

Ya me estoy despidiendo de esta ciudad. No es muy bonita, pero la he recorrido comprando regalos, y eso lo hace mas agradable, jeje. Hoy domingo hay celebraciones especiales, esta el ejercito desfilando por las calles, con banda de musica y todo, es muy curioso y bastante comun en el resto de ciudades, son muy patriotas los peruanos.
He montado en tricitaxi, de los pocos transportes que me faltaban. Es una experiencia, es una bici de tres ruedas, tiene 2 asientos delante para pasajeros, y el sillin atras del pobre taxista. Digo pobre porque Puno esta al lado del lago, pero en ladera, osea, que para abajo muy bien, a toda caña, pero cuesta arriba no veas que palizas se dan. Encima cobran menos que un taxi, asi que pobrecillos, me daba hasta palo montarme en uno, pero aqui es muy comun este transporte, lo usa mucha gente, y es bastante efectivo. Cuando es cuesta abajo es imposible llegar tarde, cuesta arriba es otra historia, a veces se tienen que bajar y empujar, es un poco inhumano.
Por lo demas ninguna novedad, salvo que he cogido un bus bastante curioso a Lima, ya que es una paliza no hay que escatimar, y prefiero ir comodo. Les habia por la mitad, pero mi espalda no esta para muchas fiestas a estas alturas, asi que voy en bus cama con comida y todo incluido, falta la piscina, pero es mucho pedir, jaja.
Mañana estoy en Lima, tengo cosas que hacer alli, asi que ya descansare en España, y mama, vete preparando una tortilla para el dia 20, por favor...

14 octubre 2006

El Lago Titicaca

¡He vivido algo inolvidable! Acabo de llegar del Lago Titicaca y necesito contarlo, jeje. Madrugué el jueves para coger el barco hacia las islas de los Uros. Estas islas son artificiales, flotantes, ya que este pueblo, cansado de recibir ataques, no se le ocurrió mejor idea que refugiarse en las aguas del lago. Y allí viven desde hace siglos. Hablan aymara o quechua, depende de la isla. Las islas son pequeñas, hechas a base de totora, que son juncos. Les dejan secar y van poniendolos en el suelo, bastante a menudo, pues se pudren y se hunden. Las casas también son de juncos, y viven de la pesca y la venta de tejidos. Yo no pude resistirme y compré algún recuerdo.
Cuando vas pisando por las islas parece que tus pies se hunden, pero en realidad parece bastante seguro. La gente es muy amable, y desde hace poco tienen luz eléctrica gracias a placas solares.
Después de visitar dos islas, volví al barco y después de 3 horas, llegué a la isla de Amantaní, una pasada de sitio, apartado del mundo, en medio del Titicaca. El alojamiento es en casas de familias de la isla, y a mi me tocó con una familia joven, compuesta por Valerio y Patricia, un matrimonio muy joven, y sus hijitas; María y Tania, de tan solo 5 meses. Como viajo solo me juntaron con JC ("Yeisi" en idioma pucelano), un estadounidense de 38 años que también viaja solo. El tío muy majete, nos hemos caido muy bien, y hemos hablado mucho.
A la hora de comer Patricia nos sirvió comida tradicional: sopa de quinua con verduras, y papas con huevo cocido, todo muy sencillo pero correcto. Allí estabamos a 4000 metros de altura, y no tienen coca, pero tienen muña, una planta aromática muy buena para combatir el mal de altura y el dolor de cabeza, así que a tomar mates de muña a todas horas. Estaba muy bueno.
Después de comer subimos a lo más alto de la isla, al templo de Pachatata, ya que aquí no son católicos, y tienen religiones tradicionales. Allí arriba me quedé hasta que se hizo de noche, me fuí el último, me sentía genial.
Bajé a cenar con JC, sopa de maíz y arroz con papas y huevo revuelto, aquí no hay mucho donde elegir, y más mate de muña. Después nos esperaba una fiesta tradicional andina, así que nos prestaron un pocho para combatir el frio... unas risas. Las chicas iban mucho más guapas, la verdad. Allí nos tocó bailar, o más bien hacer el indio (nunca mejor dicho, jeje), porque hay que ser andino para saber moverse al ritmo de la zampoña y las quenas y demás instrumentos.
Después de esto nos fuimos a descansar. Para ponerse en situación, tengo que decir que es un pueblo sin agua ni luz, ni calles, ni caminos, ni coches, por supuesto. La cena a la luz de una vela, andar por la "calle" con linternas, y todo así, una gozada. Hay gente que estaba incómoda, pero es que son la leche, si ya saben donde van. Si quieren lujos que se vayan al mejos 5 estrellas.
Por la mañana amanece muy pronto, antes de las 5, y es una gozada mirar por la ventana y ver el Titicaca, enorme.
Desayunamos pan serrano con huevo y mate de muña, y nos despedimos de la familia. Les dejé unas galletas y algo de dinero, y cogimos el barco hacia Taquile, a una hora de allí, pero diferente, con turismo, restaurantes, etc... Estaba bien, pero después de los vivido en Amantaní, no se puede comparar.
Allí pasamos unas horas antes de partir para Puno, otras 3 horas y pico de barco. Si estoy montando en todo. Hay por aqui unos bicitaxi que todavia me faltan, pero tiempo al tiempo... jeje.
Esta experiencia para mi va a ser inolvidable, ya no solo por lo vivido en las islas, sino porque he conocido mucha gente maja, unas mujeres españolas, el americano J.C., la croata Alenka, Dieck y Anika de Alemania... de todo el mundo había gente. Estoy muy satisfecho en ese aspecto, pues al viajar solo me obliga de alguna manera a aparcar la timidez y hablar y conocer gente, y es muy interesante, se aprende muchísimo.

13 octubre 2006

Puno y Sillustani

En la noche viajé a Puno desde Cuzco. El viaje un peñazo, y me tocó una señora gorda al lado que ocupaba su asiento y parte del mío, así que casi voy de pegatina al cristal todo el camino, pero bueno, llegué vivo. A las 5:oo de la mañana me alojé y me metí a dormir hasta las 10. Me sentó de lujo, pues el viaje fué incomodísimo.
Por la mañana salí a conocer Puno, a orillas del Titicaca, una ciudad normalita, pero que es la capital del folklore del Perú, famosa por ese motivo. La ciudad en si no tiene nada destacable, salvo una catedral barroca normalita. Hice unas llamadas y unas compras, y contraté una excursión para la tarde para ir a Sillustani, que es un pueblo a 33 km de aquí.
Sillustani es famoso por unas torres funerarias que tiene en unos cerros. Empezaron siendo enterramientos, y fueron evolucionando hacia el exterior, convirtiendose en época de Tiahuanaco en grandes torres, y alcanzando la máxima perfección técnica con los incas, como siempre. La más grande mide 12 metros y es impresionante, y tiene grandes sillares tallados en forma circular, todo un virtuosismo, que tios.
Lo que no me ha gustado es que el guía no tenía ni puta idea. Decía cuatro bobadas y no se complicaba. Le pregunté dos cosas y me intentaba eludir. Me jode mucho que pongan a un bombero de guía, aunque el tío era majete y no tiene la culpa, pero no solventó mis dudas, y yo pagué por llevar un guía. Cuando no dice eso de: "¿alguna pregunta?", para mi ya está todo dicho, no quiere complicaciones porque no tiene ni idea.
Después de ver esto fuimos a una casa tradicional de la zona, de piedra y barro, donde vive gente como hace 500 años, sin agua, ni luz, ni las comodidades que conocemos. Se notaba que estaba un poco montado para el espectáculo, pero aún así me ha gustado mucho. He comido cebada tostada, y estaba de lujo. Nos han enseñado como tejen, como viven, los útiles de la vida cotidiana... muy bien. Y luego un tío ha hecho un lanzamiento con honda inca, y ha mandado una piedra lejísimos, no se calcular metros, pero imposible hacerlo a mano.
Y por hoy es todo. He llevado ropa a lavar y poco más. Mañana madrugo para coger un barco a las islas del Titicaca, y haré noche con una familia aymara en la isla de Amantaní, así que bien, es lo que quería. Estaré incomunicado dos días.
Cambiando de tema. Ayer estaba en un ciber donde tambien vendían excursiones. Llegaron unos mochileros argentinos, y les pidieron 170 dolares por ir a Machu Picchu como yo lo hice. ¡Yo estaba flipando! Me gasté como 30 dólares en total. Ellos huyeron, lógico, y yo salí a buscarles, hasta que les encontré, me presenté, y les conté como llegué a Machu Picchu y todos los enlaces. Los tios, muy majetes, empezaron a llamarme San Diego, ¡que boludos! Jaja, estas cosas son las que molan de los viajes. Nos despedimos y me dieron las gracias y me desearon mucha suerte.

12 octubre 2006

Ollantaytambo

Hoy me levanté con aires nuevos. El sitio no era muy bueno, pero dormí de lujo, más que de costumbre en los últimos días. Me levanté a las 8:00, desayuné y me fuí a coger el bus a Urubamba, y de ahí en combi (record, 20 personas en una furgoneta) a Ollantaytambo, lo que me quedaba de ver del Valle Sagrado. Menos mal que he ido, pues me ha gustado mucho. Las ruinas incas no solo son Machu Picchu, y sinceramente, creo que Machu Picchu no es el mejor yacimiento inca de los que he visto. Es sin duda el más espectacular por su emplazamiento, por su misterio, porque está en la ceja de selva, la vegetación, la fauna... si, la fama es merecida, pero como joyas arquitectónicas me han gustado más otras, como Ollantaytambo o Sacsaywaman, por poner 2 ejemplos. Ollantaytambo es un pueblo actualmente habitado, es decir, como Cuzco, hay casas que estan hechas por los incas, al menos en parte. Además en los cerros de al lado hay terrazas y las mejores construcciones. Hay una parte que es espectacular. Unas enormes rocas talladas y unidas entre sí mediante otras más pequeñas, todo ello encajado con suma perfección a presión, imposible de moverse. También hay rocas talladas en la propia montaña. Son rocas sagradas, divinidades que los incas adoraban y a las que rendían culto y dedicaban sacrificios. No hace falta decir que hice unas cuantas fotos al detalle, jeje.
En Ollantaytambo se observa el culto que los incas rendían al agua, un dios más que les permitía sobrevivir. Hay agua por todas partes, por canales y fuentes preciosas, una sobre todo, con la cruz inca labrada en ella.
Disfruté durante una hora, solo que, como en todos lados, esta lleno de gente, y a veces agobia, así que volví para Urubamba, y de allí a Cuzco, donde llegué a comer. El resto del día no pienso hacer nada, que las piernas las tengo destrozadas de tanta caña esta semana, así que a ver si me recupero, que me queda el Lago Titicaca como despedida.

11 octubre 2006

Odisea en los Andes

Hoy siento que he tirado un día a la basura, aunque no todo ha sido malo. Me levanté a las 5:00 para caminar hacia Ollantaytambo, pero habia mucha policia en la vía, y no quiero problemas, así que me acorde del "más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer", y me fuí por donde llegue a Aguascalientes. Empecé a caminar a las 5:30, y al rato vi al colibrí, algo que todavía no habia conseguido, y me hizo mucha ilusión. Una hora después paré a descansar. Iba un poco mosqueado porque un tío iba detrás mío, así que dejé que me pasara. Cuando llegó a mi altura se paró a saludarme, le ofrecí unas galletas y nos presentamos. Era Leonardo, trabajador de Machu Picchu, un chaval muy majo que me hizo el trayecto muy ameno y me acompañó hasta Santa Teresa. Además me cruzó en la oroya, que es algo que da bastante miedo, así que no pude hacer menos que invitarle al desayuno, que aquí no son como allí. Un plato hasta arriba de tallarines con carne, cebolla y tomate, y para pasar las migas un café, jaja. No veas como comen aquí, será para empezar el día fuerte. Yo no pude con mi plato.
Leonardo me enseñó cosas sobre Machu Picchu y su trabajo, y también sobre el Perú, política y algunos significados del quechua. El tio habla castellano y quechua, como mucha gente aquí. También me comentó una historia dramática de la zona, y es que hace unos años El Niño destrozó el valle donde nos encontrabamos, llevandose vias del tren, caminos, cultivos y pueblos. Y pude observar el viejo pueblo de Santa Teresa completamente destrozado, una pena. Murió gente, y arrastró un tren con 5 vagones. Los pasajeros huyeron a las montañas y estuvieron 2 días sin comer ni beber hasta que fué un helicóptero. Lo dicho, un drama. Ahora la zona renace poco a poco, a duras penas.
Me despedí de él y le di el mail. Lo malo es que en Santa Teresa tenía que coger una furgoneta que tardó en salir dos horas, así que allí me tomé una cerveza mientras observaba las curiosidades del mercado. Al principio me iba a tocar el loco del conductor que me llevó, pero al final me tocó un viejete muy majo y también bastante loco, como todo chofer por aquí, jeje. Nos llevó cagando leches por los precipicios, que pude observar mucho mejor con la luz del sol. Llegué a Santa María y ¡qué suerte! Justo pasaba el bus a Cuzco, mi destino. Subo, y tras dos horas de camino, llegamos a un corte en la carretera. Hora y media de espera por culpa de unas obras. Avanzamos media hora más, y otro corte. Otra media hora de espera. Por fin pasamos, terminan las obras, y va y se estropea el bus, algo del eje trasero, justo debajo mío. ¡Qué bien! En los Andes, entre glaciares, a 4800 metros de altura, de noche, y con un frío del copón. Ya no me corté un pelo, saqué el saco de dormir y tan a gusto. Cuando lo medio arreglaron seguimos el camino, que rollo, y que largo. Aquello metía un ruido y unos chasquidos en las curvas que daba miedo, pero llegamos vivos a Cuzco, tras 9 horas metido en el bus. Em total me levanté a las 5 de la mañana y llegué a Cuzco a las 11 de la noche, una odisea para recorrer algo más de 200 km. El paisaje merece la pena, y Machu Picchu también, así que he intentado mirarlo desde ese punto de vista, porque si no dan ganas de pegarse un tiro con estas cosas.
Me he alojado en un sitio distinto, más barato y sin las 100 escaleras que había que subir en el otro, al lado de la plaza de armas, así que genial.

09 octubre 2006

Machu Picchu

¡Hoy he cumplido un sueño! Madrugué y a las 5:30 ya estaba en marcha. Me llevó una hora la dura ascensión, por escalones de granito enormes, cada uno de un tamaño. Pero estaba arriba. Al entrar no se ve nada, pero subes otros escalones y de repente aparece Machu Picchu, imponente, en un lugar increible, mágico. La mañana estaba nublada, con nieblas que se agarraban a las montañas, y no se veia Huayna Picchu, la montaña que se ve al fondo en las típicas fotos. Me dirigí allí, a ascenderla. Es una hora de ascensión muy dura, pero ya tengo piernas, y no podía dejar pasar la ocasión.
A las 8:15 estaba allí arriba. Para mi gusto de lo mejor del día, pues subí tan temprano que no había nadie, solo 2 japoneses muy majos y yo. Así que me quedé allí disfrutando, aunque Machu Picchu solo se veia a ratos, cuando se movian las nubes, pero es que se veían muchas otras cosas interesantes: pájaros, paisajes... de todo. Hasta se veía gran parte del tramo que hice caminando el día anterior para llegar a Aguascalientes. Más tarde empezó a llegar mucha gente y me bajé, que no me molan las aglomeraciones, y la cima es muy pequeña, además, que siempre hay algún gilipollas gritando o molestando.
Vi el yacimiento sin prisas. En total pasé 5 horas arriba, una gozada, hasta que sobre las 10 empezó a llenarse de gente, con buses subiendo continuamente, y aquello ya empezó a parecer el circo, lleno de domingueros y tal. Así que busqué un lugar tranquilo, lo mas alto posible, y me senté media hora, relajado. Pero llego un momento que ni allí se estaba a gusto, así que decidí bajarme poco a poco.
Macchu Picchu es una gozada, sobre todo su emplazamiento. Por suerte nuestros antepasados españoles no lo encontraron, y se conserva muy bien, porque si llegan allí hubieran hecho el castillo del Conde de Machu Picchu o algo por el estilo. Es una pena que se cargaran tantas cosas buenas de este pais, también me da vergüenza ver que los alemanes y los americanos han hecho más en un siglo, que los españoles en 5, pero bueno, al menos podemos aprender de esto. También es molesto que se llevase los honores del descubrimiento un arqueólogo americano, cuando en realidad eran algunos indígenas quechuas los que conocían el lugar, y él solo fué llevado hasta allí, pero pasó a la historia y esta su nombre por todos los sitios. Hasta el tren mas lujoso lleva su nombre.
Llegué abajo casi una hora después, empezaba a llover, y cuando llegué al hotel comenzó una tromba de agua bien fuerte, ¡que suerte he tenido! Y de paso, que se jodan los domingueros de arriba, jaja.
Me di una ducha y salí a comer. Encontre un buen sitio no muy caro, y me puse morado, para reponer fuerzas. La carne de alpaca esta muy buena, y no tiene nada de grasa. En el restaurante conocí a un chaval muy majo peruano, un limpiabotas. Era muy joven y quiere ir a España, Charlamos un rato y me informó un poco sobre la ruta que posiblemente haga mañana, caminando 30 km. hasta Ollantaytambo.
El resto del día ha llovido bastante, a ratos, así que me he dedicado a descansar, pues mañana será duro también. A partir de entonces, la última semana espero que sea más tranquila.

08 octubre 2006

Sufriendo hasta Aguascalientes

Definitivamente, hoy ha sido la mayor aventura de mi vida. Comencé ayer a las 8:00 p.m. cogiendo un bus en Cuzco hacia la selva, para bajarme en Santa María. Atravesé el puerto Abra de Málaga, de 4800 metros. Habia luna llena y se veia la profundidad del valle, y brillaban las cumbres nevadas de los Andes, muy bonito. Como siempre, incapaz de dormirme, 7 horas después llegué a mi destino. Alli cogí un combi, esperando una hora hasta que salió hacia Santa Teresa, por un camino peligrosísimo y un conductor todavía más loco que el del Colca. He descubierto que mascan hoja de coca para no dormirse, y los tios estas esquizofrénicos, parace que les han metido un petardo en el culo, y hacen todo a lo bestia, poniendo en peligro a los pasajeros. Aún así, llegamos vivos. A las 7 tomé un cafe con leche y un bocata de queso, y el tío del restaurante me explico donde coger la oroya (tirolina) para cruzar el río y comenzar la marcha. Menuda movida, llegué a la oroya y habia 6 peruanos esperando. Alguien dejo mal la cuerda, y la cesta para cruzar estaba al otro lado y no se podia recuperar. Al rato una mujer al otro lado cruzo a pulso en la cesta, todo un mérito, y ya teníamos la oroya. Cruzaron dos viajes, y en el tercero fuí yo, con dos peruanos y un perro, todos en una cesta de un metro cuadrado o algo menos... adrenalina pura que dura 15 segundos, colgados a toda caña viendo abajo el río con fuerte corriente. A partir de ahí a caminar solo. Eran las 7:30 y estaba en forma. El paisaje invitaba a disfrutar, entre mariposas de todos los colores, la mejor una violeta tan grande como mis dos manos juntas, preciosa. Pero he visto como 20 especies más, y unos pájaros guapisimos, con colas de colores. Tambien insectos y muchísima vegetación, medio selva, con plataneros, cafetales, algodón, y mil especies que desconozco. Flores de todos los tamaños y colores, y todo esto con un ruido de pajaros y bichos... como en las peliculas de aventuras, una pasada.
A la media hora me adelantas 3 franceses que venían en la combi. Llegué a un chorro de agua inmenso que brotaba una mole rocosa, una brutalidad, un ruido ensordecedor que hacía vibrar el terreno. Daba miedo. Unas fotos y adelante. De repente dos perros salvajes se enrabietan conmigo, que mierda, les tengo bastante miedo, pero me hice el valiente, cogí unas piedras, y cada pocos pasos me agachaba y se asustaban, así hasta que me dejaron pasar y les dejé atrás. Seguí el camino disfrutandoc omo un niño, y llegué a un lugar donde vi la mayor cascada hasta el momento, calculo que de 300 a 400 metros, ya me informaré, pero espectacular. Dies o doce fotos y adelante. Todo esto solo y más emocionado que un niño el día de Reyes.
Tras casi dos horas caminando llegué a una estación hidroelectrica, el punto intermedio. A partir de ahí seguir la vía del tren por lugares igual de increibles, y oliendo a Machu Picchu, jeje.
Andar por la vía es muy dificil, los pies sufren muchisimo, pisas mal, no coges ritmo... pero bueno, yo poco a poco adelanté a un grupo de judios, que esto está lleno.
En el camino me encontré con una pareja catalana, muy majetes, que regresaban, y me dijeron que me quedaban 6 km. Nos deseamos suerte y hasta luego.
Seguí a lo mío, cada vez más cansado, hasta los 2 últimos kilómetros, que las pase más putas que en vendimias. Las piernas ya no iban, y para colmo había dos túneles que me daban bastante miedo, les pasé medio corriendo, a pesar de estar roto, y que dentro del tunel habia espacio suficiente para el tren y personas, pero prefería evitarlo. Luego vi que la gente peruana va tan tranquila, asi que no habrá mucho peligro, no se.
Pasito a pasito, a pleno sol y muy cansado llegué a Aguascalientes, con una sudada de espanto. He tenido que perder varios kilos hoy, y eso que he tomado zumos y barras energéticas por el camino. Pero lo he pasado verdaderamente mal, me ha traido el orgullo y la ilusión, porque yo ya estaba medio muerto.
Fuí a un hotel en la plaza que recomiendan en la guía, 10 € por dos noches, todo un exceso para estas tierras, pero este pueblo es así de caro. La conexión a internet vale el triple que en cualquier sitio del pais, y así todo. Pero vamos, que 10 € es un regalo, jeje. Me di una ducha nada más llegar que me sentó como una cerveza fresquita. ¡Vaya palizón! A veces pienso que quién coño me manda meterme en estas cosas, pero me lo paso de lujo, la verdad que compensa. Hoy no pienso mover un dedo, solo para comer y quizás para ir a los baños termales.
Me tumbo en la cama, como unas galletas, me relajo...y de pronto un ruido se acerca, como un temblor... ¿otro terremoto? Ya es mala suerte. Voy a salir por patas a la calle y escucho un "piiiiiiiiiiiiii"... ¡el tren!

Adios Cuzco

Ya me he estado despidiendo de la ciudad. Esta mañana vi la Catedral por dentro, muy bonita y con muchas pinturas. Luego acompañe a Fiore al mercado a comprar recuerdos y luego a despedirla a la estación, ya me quede solo y comienza una nueva aventura.
Por la tarde he estado visitando el Coricancha, el antiguo palacio del Inca, el mas rico de América, aunque el oro que tenia no se conserva. Pero aun asi muy bonito, y eso que solo se conserva una pequeña parte, pues los españoles construyeron encima una iglesia, la de Santo Domingo, que tambien he visitado.
Luego he visto la casa de Garcilaso de la Vega, hijo de padre español y madre india, fue de los primeros mestizos. Alli hay un museo muy bueno sobre historia del Perú, pero ver muchos museos cansa, asi que lo vi un poco rápido.
Y ahora planeando el viaje a Machu Picchu, que ya decidi hacerlo por mi cuenta. Salgo dentro de 2 horas en bus hacia un pueblo en la ceja de selva llamado Santa María, y luego en furgoneta hasta Santa Teresa, y luego a pie hasta Aguascalientes, al pie de Machu Picchu. La ascensión tambien quiero hacerla a pie, y quizas descanse para madrugar al día siguiente y ver el amanecer alla arriba. Ya veremos como sale.

07 octubre 2006

El Valle Sagrado (2ª parte)

¡Vaya palizón! Como siempre, mereció la pena, pero estoy machacado. Madrugamos para ir a otra parte del Valle Sagrado. Después del bus tuvimos que coger un taxi a Maras. Ibamos 10 personas, jaja. Según avanzabamos aparecen dos niñas al pie de la carretera... ¡hay que cogerlas! Yo flipo, y para mi asombro las niñas encontraron un hueco, y encima no ibamos del todo mal, jeje, de record Guiness.
Primero fuimos al yacimiento de Moray, que son unos preciosos bancales o cultivos en terrazas en forma circular, completamente perfectos, lo mas parecido a un anfiteatro o a una plaza de toros. Los incas sembraban diferentes cultivos en los diferentes niveles para experimentar. Cada nivel tiene como su pequeño microclima, y asi sabían lo mas conveniente para cada fruto, no eran listos ni nada.
Después comenzamos a caminar por los campos de cultivo donde siembran trigo y lo siegan con hoz. Fuimos hacia el pueblito llamado Maras, con sus casas de adobe y algunas portadas de piedra muy bien tallada. Era el patrón del pueblo, y estaban en fiestas, con petardos y atracciones en la plaza. Dimos una vuelta, me compre unos bizcochos artesanos y seguimos de camino a las salinas de Maras, nuestro próximo objetivo. Todo esto a pie por lugares con mucho encanto, que para eso estamos en los Andes. El nevado Verónica es el más alto (5.800 metros), y de vez en cuando se dejaba ver entre las nubes que amenazaban lluvia.
Después de un camino bastante jodido y en continua bajada, muy pronunciada y pedregosa, llegamos a un lugar de cuento, las Salinas. Creo que es el sitio más impactante de los que voy a visitar, por encima de Machu Picchu, pues parece algo increible, encontrar en un valle de color arcilloso un paisaje completamente blanco, como nevado. El agua sale de un manantial medio caliente, y los incas crearon una serie de pequeñas piscinas unas debajo de otras por las que canalizan el agua, luego las cierran y hacen que este se evapore en un mes, consiguiendo la sal. Actualmente siguen produciendo a pleno rendimiento, y menos mal que tengo fotos para demostrar que esto es la leche.
Después de recorrer las salinas y hacer fotos, seguimos descendiendo a pie hacia el río Urubamba que veíamos al fondo del valle. Es el río que pasa por debajo de Machu Picchu, y que más tarde desemboca en el Amazonas. Tuvimos que cruzar por un puente colgante de tablas medio descuadradas que daba bastante medio, pues se movia para todos lados. Mi sorpresa fué mayor al llegar al otro extremo y ver a un coche esperando para cruzarlo... yo me piré, no quise verlo, jaja.
Finalmente, tras un palizón, llegamos a la carretera, donde cogimos una "combi" a Urubamba, y desde allí, un bus a Chinchero, un pueblo precioso y muy tranquilo a 3.800 metros, todo un desafio ascender por sus calles escalonadas. Pero todo esfuerzo merece su recompensa, y arriba tiene una plaza magnífica, con arquitectura inca y española. Tiene la mejor iglesia que he visto en Perú, al menos por dentro, completamente decorada con pinturas, hasta el humilde techo de madera, que era lo más bonito. Además está donde antes estaba el palacio del Inca, y se conservan muchos restos, terrazas, rocas sagradas que representaban dioses... una guía nos comentó bien todo. El sitio esta un poco apartado, es muy tranquilo, y parece que la gente no vende mucho, así que los niños te persiguen, se meten en medio ofreciendote pulseras y muñequitos, con una vocecita que joder... que mal lo he pasado. Compré 2 muñequitos muy graciosos, pero mi mochila va a estallar, y me queda mucho por recorrer. Es una pena muy grande, pero yo no voy a arreglar nada.
Finalmente cogimos una moderna furgoneta que nos trajo a Cuzco, y he hecho unas fotos de paisajes montañosos al atardecer muy guapas, y también de la Luna, que cuando llegamos a Cuzco se veia enorme. Ahora cenar y descansar, que bien merecido lo tenemos. Fiore hoy me ha aguantado a duras penas, pues no esta muy acostumbrada a caminar, y pensé que moriría por el camino, jeje. Pero ha aguantado la tia.
Y una cosa más. El viaje más económico al pie de Machu Picchu me vale 40 euros, un atraco. Con ese dinero me doy la vuelta al Perú y me sobra pasta, asi que he decidido que voy a ir a la aventura, pues hay una opcion alternativa que sabe poca gente. Lleva muchas horas de bus y luego caminar, pero me jode pagar ese dinero, cuando por una cuarta parte me voy de aquí a Lima, que esta mil kilómetros mas lejos.

06 octubre 2006

El Valle Sagrado (1° parte)

Hoy he hecho la primera incursión en el Valle Sagrado. Cogimos un bus temprano hasta Pisac, a 32 km, por carretera montañosa, pero bien. Luego un taxi que nos llevaron hasta la entrada a las ruinas incas de Pisac. Yo queria subir a pie, pero menos mal que no lo hicimos asi, porque era una paliza de muerte como luego pude comprobar. El casoo es que estas ruinas me han dejado encantado. Hay terrazas espectaculares para cultivos, ascendiendo montañas enteras. Mas arriba pude ver los sistemas de canalizacion del agua, lo que permite riegos por inundacion controlada, eran unos genios estos incas.
Aunque Pisac no tiene la fama de otros lugares, a mi me ha parecido un lugar fantastico, con muy buenas vistas sobre el valle y un conjunto de edificios sumamente interesante, que se extiende por mas de un kilometro en lo alto de las montañas. La mejor de la suerte se presento cuando nos encontramos con un indio tocando la quena de forma magistral, un virtuoso el tio. Se merece toda la admiraciom del mundo, asi que le di unas monedas y nos hicimos unas fotos con el. Es una gozada estar en un lugar asi escuchando esa musica, es mejor de lo que hubiera soñado. Ademas no habia mucha gente porque el dia estaba medio lluvioso, asi que muy tranquila la visita. Nos llevo mas de una hora, y luego comenzamos el descenso a pie, por unos senderos, pasadizos, una cueva y unas escaleras muy peligrosas, y mas con lluvia, asi que mucha precaucion, que no quiero volver a España en caja de madera de pino, jeje. El caso es que tardamos como hora y cuarto en bajar, y en el pueblo estaba el enorme mercado. Es una maravilla, y al mismo tiempo una putada, porque quieres comprarte todo, pero claro, para eso hace falta pasta. Si que he hecho bastantes compras no muy caras, salvo las joyas de plata, que son mas caras, pero aun asi baratas para el precio de España, asi que dejo abierto el apartado de encargos, paisa barato, jaja.
Alli pasamos como 3 horas, pero podia haber pasado otras tres tranquilamente, pero hay mucho que ver en este valle, asi que cogimos un bus hacia Tambo Machay, conocido como el Baño del Inca, un lugar pequeño pero precioso. De nuevo con lluvia, que se paro rapido, por suerte. Despues de ver Pisac, Tambo Machay te parece insignificante, pero reune mucho encanto en poco espacio. Dicen que quien bebe de los dos caños de agua tendra mellizos, asi que yo por si acaso no tocarlo, jaja.
Luego bajamos al cercano yacimiento de Puca Pukara, una especie de fortaleza pequeña, como un punto de vigilancia, con perfecta arquitectura y muy buenas vistas de las montañas.
Despues nos esperaban unos 5 km a pie hasta el fantastico yacimiento de Sanqsaywaman, pero antes visitamos una enorme roca llamada Qénko, en quechua es "zigzag", y tiene labradas figuras en zig zag y cuadrados.
De camino unos niñitos se nos acercaron y cantaron un villancico. No pega ni con cola, ya lo se, pero aqui cualquier cosa sirve para pedir una ayuda, asi que Fiore les dio unas monedas y yo dos paquetes de galletas de chocolate. Es jodido ver que casi se pegan, pero intente dejarles claro que lo repartieran bien. Son un encanto de gente y es una pena que haya tanta necesidad. Habia una niña de 8 años, no mas, con un bebe en sus brazos, supongo que le dejaron al cuidado de su hermanito pequeño.
Al llegar a Saqsaywaman es imposible no quedarte boquiabierto, pues es un lugar increible, y muy dificil asimilar que eso lo hicieron personas, pues hay piedras labradas de forma matematica encajadas como un puzzle y con 300 toneladas de peso. Estoy seguro que hoy en dia, con maquinaria y todo, nadie seria capaz de realizar una obra asi. Los muros hacen forma de zig zag, y se dice que Cuzco tiene forma de puma, y Saqsaywaman serian los afilados dientes. Recuerdo haber visto planos en libros, y es una opcion bastante problable, lo que demostraria que ademas de excelentes arquitectos, eran excelentes urbanistas. De hecho Cuzco tiene calles intactas en cuanto a organizacion desde el periodo inca.
Al terminar la visita, regresamos a Cuzco a pie, por los caminos que los incas hicieron, y despues de una gran paliza llegamos al hotel a por nuestra merecida ducha. Hay sido un dia intenso y de esfuerzo, con lluvia por momentos, pero todo lo visto compensa cualquier cosa, y ademas me estoy poniendo en forma sin ir a gimnasio, jeje.
A veces no me creo lo que estoy haciendo y viviendo, y tardo un poco en asimilar y digerir lo que he visto, pero luego me doy cuenta de lo afortunado que soy por estar aqui, e intento disfrutar de cada minuto, que ya tendre tiempo de descansar.

05 octubre 2006

Cuzco, el ombligo del mundo

Ya estoy en Cuzco. El viaje duró 10 horas por carretera, lo malo es que hacía muchisímo frio, y lo pasé un poco mal en el camino. Ya tengo la lección aprendida para el próximo viaje por el altiplano.
Cuzco es una ciudad encantadora, entre cerros no muy altos, como formando un enorme círculo en torno al centro de la ciudad. Qòsco en quechua significa ombligo del mundo, y el origen de la ciudad se cuenta en una antigua leyenda. Cuando los españoles llegaron aquí era una ciudad increiblemente rica. El Coricancha tenia 700 sillares de piedra recubiertos de placas de oro, cada una de dos kilos. Duraron pocos meses, pues nuestros antepasados lo fundieron todo en lingotes y lo mandaron a España, así que el día que nos pasen la deuda con intereses...
La primera impresión de Cuzco ha sido muy buena. Tiene una plaza de armas muy bonita, con la catedral y la iglesia jesuita como protagonistas, y unos soportales con tiendas y restaurantes. El turismo está muy explotado, y a veces resulta un poco agobiante que todo dios te ofrezca cosas: excursiones, artesanias, masajes, cenas... son incansables y hay mucha competencia.
Para visitar los museos y las ruinas incas del entorno de Cuzco hay que sacar un boleto que vale 70 soles. A mi me costó la mitad con carnet de estudiante. Hemos visitado dos museos muy interesantes,sobre todo el del Coricancha, pues el otro era de pintura religiosa, y te acaba cansando tanta virgen y tanto santo.
Lo mejor es pasear por las calles más antiguas, donde las piedras que los incas pusieron hace más de 500 años siguen intactas. La ciudad ha sufrido dos terribles terremotos que destrozaron todo, salvo las construcciones incas. Viendolo de cerca no me extraña, porque son enormes piedras trabajadas de tal forma que no hay quien meta una hoja de papel en las uniones. Además tienen forma de talud, que las hace más estables. Y al fin vi la famosa piedra de los 12 angulos, todo un prodigio de trabajo en cantería.
Hemos tomado un mate de coca en un bar que tenían música española: La cabra mecánica. Son tan buenos que también suenan por estas tierras. Nos hemos dado una paliza a andar. Es una ciudad de unos 400.000 habitantes, algo así como Valladolid, pero vas de un lado a otro y al final te machacas las piernas, pues son subidas y bajadas, pero merece la pena. El sitio donde nos alojamos esta en un alto, y tiene una terraza con vistas estupendas a la Plaza de Armas. Todas esas calles se parecen mucho al Albahicín de Granada, es muy curioso, y tambien hay mucho hippie. Es algo más cara por culpa del turismo, pero encontramos un sitio para comer por un euro, así que genial.
Mañana iré con Fiore a un mercado muy popular que hay en Pisac, a 32 km. Por la tarde vamos a ver ruinas incas del entorno de Cuzco.

04 octubre 2006

El cañón del Colca

Acabo de regresar del cañón, ¡qué pasada! Madrugamos el lunes para salir a las 6:00 a.m. Después de 6 horas infernales en bus por carreteras de montaña y caminos empedrados y polvorientos llegamos a Cabanaconde, un pueblito en pleno cañón del Colca a 3200 metros sobre el mar y rodeado de enormes montañas de casi 6000 metros. Las vistas son espectaculares. Es el segundo cañón más profundo del mundo, por detrás del Cotahuasi, cerca de aquí. Es el doble que el cañón del Colorado. A pesar de todo esto, lo que más me gustó de este pueblito andino es la gente y el modo de vida. Es como retroceder en el tiempo. Viven con las antiguas costumbres incas, hablan quechua, siembran con las manos, aran con mulas, no existen las comodidaes que nosotros conocemos, y sus calles son de casitas humildes de barro y piedra. Yo me he quedado alucinando con todo esto, y con su amabilidad y felicidad. Parece que es un lugar donde no ha llegado la maldad. Todo el mundo te pregunta de donde eres, y al responder a un señor que soy de España, me dijo: "¡qué cacheroooo!"(es como ligón, pero en fuertecito). El hombre era muy simpatico, pero como adivino... ni puta idea, jaja. Menos mal que Fiore vino conmigo, porque hay palabras que no entiendo, y ella me las traduce.
En este pueblo las señoras visten ropas preciosas, de todos los colores imaginables formando figuras geometricas, y con los sombreros más bonitos que he visto nunca. Son bordados de mil colores, todo muy alegre. Visten asi incluso para trabajar la tierra, y algunas llevan sus bebes en la espalda, cubiertos con tejidos muy bonitos. Todo esto es para vivirlo, porque contado es inimaginable. Los señores trabajan el campo en terrazas que usaron los incas hace mas de 500 años, siguiendo los metodos tradicionales, y con resultados excelentes, pues me he estado alimentando estos 2 dias como hacen los quechuas, con una dieta a base de sopas de verduras (mi madre me mata), quinua, que es un cereal y carne de alpaca, que esta muy buena y tierna. Me ha encantado vivir una experiencia asi.
Esta mañana me levanté con la vista de los picos mas altos de los Andes nevados, ya ves que gozada. Nos dirijimos en bus hacia la Cruz del Condor, y tras más de una hora de espera en un paraje montañoso impresionante, con una caida al rio de mas de 3000 metros, apareció el enorme condor, con una envergadura de 4 metros con las alas extendidas, es el pájaro más grande y pesado capaz de volar. No le he visto mover sus enormes alas, solo planea, y puede recorrer así mil kilometros, el tío. Es un portento de la naturaleza, y no me borro la imagen de la mente. Lo único malo es que el paraje esta siendo explotado en exceso a mi juicio, con mogollón de domingueros que llegan allí, se bajan, hacen 4 fotos y se piran, pero bueno, de esto hay en todos los lados, y Perú no se libra.
Luego para relajarnos fuimos a Chivay, a 2 horas en bus por esos caminos de Dios... sin comentarios. Allí hay unos baños termales que compensan todo el esfuerzo del viaje dando saltos en el asiento. Dos horas en el agua me dejaron como una pasa, jeje. Me quedé como nuevo, y fuimos a comer a un sitio un poco caro pero con una comida exquisita. Me puse ciego, aunque no era lo más adecuado, pues pronto cogimos el bus hacia Arequipa. El conductor era un kamikaze total. Si le llevan al Paris-Dakar se pule a todos, seguro. Nos ha traido a toda caña, yo creo que en las curvas se ponia a dos ruedas... como para no pillarse cagaleras en estas tierras. El caso que todo esto por caminos y carreteras montañosas, hemos llegado a Arequipa antes de la cuenta, y por eso estoy escribiendo. En menos de media hora parto a Cuzco, otras 12 horas de autobus. Hoy completaré 18 horas de autobus, pero esto es asi. El viaje al Colca fué el peor de mi vida, pero la recompensa fue de las mejores. Es el precio que hay que pagar, jeje, y además, es una aventura, y así si que se viven emociones fuertes.

01 octubre 2006

Ya no estoy solo

Hoy me despertee y fui a tomar el desayuno a la plaza de Armas. Por el camino empece a ver mucha gente y mas adelante muchos militares. Yo no sabia que pasaba, hasta que escuche musica de una banda y habia un gran desfile militar en la plaza. Luego me conto un taxista que lo hacen todos los domingos aqui, el alzamiento de la bandera. Todo estaba lleno de gente, y el trafico cortado. Hay mucho respeto por la bandera peruana, esta en todos los sitios. Despues del desayuno fui a la estacion de autubuses a buscar a Fiore. ¡Ya no estoy solo! Anoche, siendo sabado, me sentia un poco desanimado para ir a tomar cervezas yo solo, asi que me lo tome de relax, me tome un mate y a descansar. Hoy ya sera otra historia.
El taxista que nos trajo era un tio muy majete, y nos conto cosas de los volcanes y nos informo sobre como ir al Colca. Ahora nos hemos informado todavia mejor en una oficina de turismo.
Hemos estado haciendo visitas, esta vez he sido yo el guia, que ya me conozco bastante bien la ciudad, jeje. Cuando ibamos paseando, en un kiosko vimos periodicos que anunciaban en primera pagina en terremoto de ayer. Y parace que no fue broma, se cayeron casas y todo, no es moco de pavo. Un 5,5, yo me he comprado el periodico de recuerdo: ¡sobrevivi a la tragedia! jaja.
Por lo demas aqui las cosas estan muy bien, pasando mucho calor, y preparando el viaje al Colca. Creo que estare algun dia sin escribir, pues lo mas seguro es que dormire en un lugar que no tiene luz, asi que dificil encontar un ciber, jeje.

30 septiembre 2006

¡Temblor!

¡Todavía estoy alucinando! Estaba publicando la visita al museo y de pronto empieza a moverse mi mesa y mi pantalla. Pensé que el de al lado estaba moviendolo, pero luego la silla empezó a moverse... ¡un terremoto! Es la leche, la gente espera un poco, y luego se ríe y dice "ya paso". Parece que aquí es tan normal que nadie se asusta, pero me gustaría haber tenido un espejo para verme la cara. Creo que todavia estoy blanco y ya han pasado dos minutos, jeje.

"Juanita", la princesa del hielo

Hoy me he despertado completamente recuperado, en plena forma, jeje. Esta ciudad me encanta, y anoche pude estar paseando tranquilo por sus calles. Todo esta muy cuidado y tienen muy buena iluminación, sobre todo en los edificios emblemáticos.
Lo primero que hice después del desayuno fué visitar el Museo Santuarios Andinos. He disfrutado mucho. El principal y morboso atractivo es la momia "Juanita", pero este museo es mucho más que eso. Es como una fusión de arqueología y alpinismo, pues trata las ofrendas que los incas hacían a los dioses montaña. Los volcanes en erupción eran dioses enfadados, y para compensar ofrecían doncellas nobles en sacrificio. Es un ritual extendido en todos los Andes, y lo más increible es que llegaron a cumbres de 6800 metros. Todo esto hace más de 500 años. El museo espone zapatos y útiles de estas expediciones que duraban más de 2 meses, y cantidad de ofrendas: cerámicas, joyas, tejidos... Y todo culmina con "Juanita" en una cámata frigorífica a 20 bajo cero. Fué encontrada en la cumbre del Ampato, que se ve desde aquí, aunque estaré a sus pies dentro de 2 días, cuando vaya al Colca. Esta momia ha servido para hacer multitud de estudios sobre la vida cotidiana inca: alimentación, salud, etc. Su estado de conservación es excelente. Fué sacrificada a los 12 o 14 años en la cumbre, una práctica bastante habitual.
Por lo demás sigo visitando y paseando por Arequipa. Estoy muy cómodo aquí, y hoy voy a probar su gastronomía, ¡al fin! Todo tiene una pinta deliciosa, y hay muchas pastelerias en la plaza. Las gentes son muy graciosas, ves de todo. Hay unos que tienen el movil en la mano y te le ofrecen para hablar, a 50 centimos el minuto, jeje. Son muy ingeniosos estos peruanos. El mejor es un niño de unos 5 años que va con 3 manzanas intentando hacer malabares cuando se cierra un semáforo. Se pone en medio de la calle, y luego pide una propina a los coches. Es triste a veces, pero compensa una sonrisa cuando le dan una moneda. Yo a veces lo paso mal, pero es imposible ayudar a todo el mundo, asi que tienes que seguir caminando.

29 septiembre 2006

Arequipa, la ciudad blanca

Al fin en Arequipa, tras una noche entera metido en un autobus durante 10 horas. Llegué aquí al amanecer, y he aprovechado la mañana para conocer el centro de la ciudad. Estoy a 2300 metros de altura, y Arequipa esta rodeada de volcanes, el más cercano el Misti, con casi 5800 metros, pero les hay mayores, como el Ampato, de mas de 6200... esto es una pasada, nunca vi montañas tan enormes.
A Arequipa se le conoce como la ciudad blanca, ya que muchas de sus construcciones son de piedra blanca muy bonita, y tiene muchos edificios coloniales. Sin duda es la ciudad que más me ha gustado hasta el momento. Está bastante cuidada a pesar de los terribles terremotos que ha sufrido a lo largo de la historia. La plaza es preciosa y siempre esta llena de gente. Es dificil encontrar un banco libre. Me encanta, estoy muy bien aquí y me voy a quedar unos días aclimatándome a la altura para ir al cañón del Colca. Además, así me recupero de un pequeño problema de diarrea que he tenido, jeje, no me he librado. Ahora estoy a jamón york y poco más, pero mucho mejor. Aquí las comidas tienen una pinta buenísima, y es una tentación, pero no quiero forzar.
Ayer tomé un mate de coca, que aquí es legal. Es más que eso, pues los incas la consideraban una planta sagrada, y en zonas altas su consumo es necesario para no sufrir el mal de altura. Es como un te o parecido, y además es bueno para diarreas y otras dolencias. Perú produce el 32% de la producción mundial de hoja de coca, pero la mayoría es para consumo tradicional.
Me he alojado en un sitio económico en el centro, y estoy encantado, tengo todo lo que necesito cerca, y es una zona vigilada. Se ve mucho policia aquí, mucha seguridad. El trato al turista es excelente, y la gente muy amable. Creo que es algo general aquí, y que hay muy mala prensa en Europa sobre determinados paises. Pero bueno, allá cada uno, el que quiera comprobarlo que venga y viva la experiencia.
Para mañana tengo programadas unas visitas a un museo y quizas un convento, ya veré. No me gusta pagar mucho por ver conventos, jeje. Mi amiga Fiore viene aquí el domingo desde Lima, e iremos juntos al cañón del Colca, pero sin nada contratado, a nuestra bola.

28 septiembre 2006

Ica, Huacachina y Nazca

He tenido algunos problemas para poder escribir, pero ya estoy aquí. Ayer fuí a ver el museo regional de Ica, pequeñito pero bueno, una pena que los tejidos mas ricos fueran robados hace dos años. Aún así merece la pena, tiene otros tejidos buenos, útiles en la vida cotidiana de las culturas Paracas y Nazca, y unas momias increibles. Para los estómagos delicados quizas no sea bueno ver estas cosas, jeje. Además había esqueletos en los que se veía lo avanzadas que estaban estas culturas en cuanto a medicina, con trepanaciones de craneo que fueron curadas, absolutamente increible. Los objetos para trepanar eran bestiales, asi que no quiero ni imaginarlo...
 
Después di un paseo por Ica, una ciudad agradable y con mucho tráfico, como todas. Comí un lomo saltado y me fuí al oasis de Huacachina, donde estaba alojado. Después de una siesta miré a mi alrededor, y vi la duna más alta. Pues allá voy. Todo decidido empecé a subir, pero al minuto me di cuenta de mi lamentable estado de forma, aparte de caminar cuesta arriba con arena es muy muy dificil. Y yo tan confiado, elegí la duna más alta... Me tenía que parar cada 20 pasos para coger aire, y a ratos las piernas ardían. Todo esto en un desierto a pleno sol. Sufriendo llegué a la cima, ¡qué satisfación! ¡y que cabezón soy! De todas formas el esfuerzo mereció la pena, pues las vistas son una pasada. Ves la inmensidad del desierto, y ves Ica, que está en un valle fertil a punto de ser absorvida por las dunas. Y no digamos Huacachina, tan pequeñito allí abajo, parace que en cualquiero momento las dunas lo taparán. Yo por si acaso ya no estoy allá, jeje. Me tomé 3 cuartos de hora allá arriba, mirando el desierto mientras atardecía. Es una pasada, me hubiera quedado horas, pero estaba anocheciendo y quería pegarme un baño en la piscina, asi que bajé, al principio con precaución, pero cogí confianza y me lancé a la carrera, ¡qué gozada! Los pies se enterraban en la arena, pero aún así bajé en dos minutos o menos. Luego saqué 2 kilos de arena de cada bota, jeje.
 
Me pegué el bañito deseado, yo solo en la piscina y anocheciedo en el desierto, ¿qué más se puede pedir? Estaba de lujo. Me duche y di una vuelta por el oasis, tan tranquilito.
Después de una noche de muy buen sueño, me he despertado hoy a las 6:30. Al principio se me torcieron las cosas, los horarios que me dieron no eran buenos, y me tuve que buscar la vida para coger un bus a Nazca. Dando vueltas, medio perdido... un lio. En Perú no hay estación de autobuses, cada bus sale de su oficina, y claro, a veces estan juntas, pero otras no. El caso es que finalmente después de media hora conseguí uno para las 8:00 a.m. En 2 horas en Nazca, y ahí hubo más suerte. Bajé del bus y la gente está a venderte su vuelo en avión sobre las Lineas de Nazca (Patrimonio de la Humanidad). Son unos geoflifos excavados en pleno desierto que forman figuras geométricas y animales, solo visibles desde el cielo, y es ahí donde está el enigma. ¿Cómo una cultura de hace más de dos milenios pudo hacer eso y con qué fin? Se supone que es un calendario astronómico, pero aún así el enigma sigue ahí.
 
El caso es que empecé a negociar, me pedían 55 dólares por una mierda de vuelo de 15 minutos en un avión de 16 personas, que si te toca en medio no ves nada. Yo paso. Me bajo a 50, pero tampoco. Me fuí y apareció otro. Al final le saqué el avión que quería, pequeño y yo de copiloto por 45 dólares, una buena pasta, pero bien empleada. Y allí estaba yo a los 20 minutos, sentado en el asiento de copiloto de un avioncito de 6 personas, no muy nervioso... hasta que me veo en la pista despegando... en cuanto sube 10 metros aquello se mueve para todos lados por culpa del viento, ¡qué sensación! Es algo tan pequeño y volando tanb alto que es mejor no pensar en más... Allí estaba, arriba, viendo el desierto, y pronto las lineas, algo increible. Me han encantado, sobre todo el dibujo del condor, el mono y el colibrí. Son de una perfección matemática que no tiene explicación. Pero lo que más me impactó es que el desierto esta repleto de lineas completamente rectas que se extienden por kilómetros, sin desviarse ni un centímetro. Y algunas eran anchas y se iban estrechando hasta terminar en punta de flecha, ¡eran perfectas!, ¿cómo puede ser? La verdad que María Reche, la matemática austriaca que estudió las líneas durante toda su vida determinó que era un calendario, bien, pero ¿toda esa perfección?, y ¿quién coño quiere un calendario de decenas de kilómetros? Bueno, yo no soy quién para juzgar nada, pero sigo flipando con todo esto. También estan los que dicen que son pistas extraterrestres y todo eso, jeje, siempre aparecen estos charlatanes, ¡qué tios!
 
Bueno, baje del avión con un ligero tembleque de piernas, pues el aterrizaje acojona bastante. Empieza a bajar encima de la ciudad, y ves las casas cada vez más y más cerca. Claro, yo todo esto en primera fila, el piloto allí tocando mandos y tal, y se para el motor. Yo no lo sabía, pero vi que aquello era normal, y aterrizamos tan tranquilos planeando. ¡Qué bien se esta con los pies en el suelo!
 







 
Y nada, eso es todo. Estoy en Nazca, y aquí no me quedo. He comprado billete nocturno para Arequipa en bus semicama. Son 10 ó 12 horas y no quiero ir sufriendo, asi que me gasté un poco más por ir cómodo. Ahora comeré y pasaré la tarde aquí, aunque no hay mucho que ver, tienes que desplazarte o coger una excursión, y hoy ya he gastado mucho.

27 septiembre 2006

Islas Ballestas y Paracas

Bueno, antes de nada deciros a todos que os agradezco mucho vuestros comentarios y ánimos, que en los momentos un poco más bajos me animan un montón. Ayer no hice nada especial, pero hoy lo he compensado pegándome una paliza... Me levanté a las 6:30 para iniciar la excursión, Aquí a las 6 ya es de día. A las 8 tomé el barco para Islas Ballestas. Nada más salir del puerto los delfines saltaban en el agua, ¡no veas que bonito! Luego llegamos al famoso Candelabro de Paracas, que es una figura escavada en la roca. Tiene 170 metros, y se ve desde muy lejos. Hay muchas teorías, pero ninguna confirmada. La que descarto de inicio es la de los flipados: fueron extraterrestres, jeje. Lo más facil cuando algo no se sabe.
En el mar había nubes de pájaros, eran como bandadas de miles de cormoranes y pelícanos, no veas que pajaros más grandes estos. Y que chulos son. Me acordaba de la película de dibujos del pez ese... no me acuerdo del nombre. Los piqueros son mis favoritos. Van volando, de pronto suben un poco, y se dejan caer en picado al agua, pero a una velocidad y con una violencia brutal, y justo antes de entrar toman forma de flecha, y ¡zaaasss! se clavan. Yo creo que llegarán un par de metros de profundos, que bestias.
Al llegar a Islas Ballestas un olor apestoso inunda el aire. Es el guano, los excrementos de millones de aves que sirven de fertilizante y se pagan a precio de oro. Las islas estan cubiertas de guano, pero también de miles y miles de aves. A veces ves la superficie negra, pero no es la roca, son los pájaros. Pero de las islas lo que más me gustó fué ver a los lobos marinos, tomando el sol tan tranquilos, algunos nadando... Había una playa repleta. Cada macho tiene 15 ó 20 hembras, no son listos ni nada, jeje. También había pinguinos, que chulos que son. Se ponen todo tiesos a tomar el sol y parece que están pidiendo una foto.
El mar se fué picando, y en medio de dos islas va el motor y se para. A ver, ¿algún valiente se baja a empujar? jeje, unos minutos medio naufragos en el Pacífico, pero pronto se arregló y seguimos la visita. Era la lancha más rápida y adelantábamos a todas al regreso a tierra firme.
Luego una hora de descanso antes de ir a la Reserva de Paracas. Conocí a Felipe, programador informático francés. Un día dejó todo y se fué a conocer la Patagonía argentina. Parece que el chaval se lió un poco más de la cuenta, y lleva un año por Sudamérica. Ha hecho más de 4.000 km. a pie, y no sabía ni decir "hola", y ya habla un español más que aceptable. ¡Qué tío!
La Reserva de Paracas me ha encantado. Es una península, puro desierto con una costa preciosa. Vimos flamencos, y unas playas increibles. La de la Catedral, la de Yumaque, la playa Roja... en unos sitios fantásticos. Si fuese España ya había 500 hoteles de 20 alturas en primera linea, pero esto son playas vírgenes, por suerte. Comí sopa de pescado y chaufa de marisco por 10 soles con los pies casi en el mar, un sitio de alucine, en Lagunillas.
La visita se terminó, y yo iba como un niño despidiendose del mar en su último día de vacaciones. Ya no lo veré más en mi viaje, al menos hasta el regreso. Cogí mis cosas en Pisco, y en bus estaba en Ica en una hora. Ica esta bien, he dado una vueltita por allí antes de coger un taxi al desierto. Ahora estoy en el Oasis de Huacachina, un sitio muy bonito rodeado de dunas gigantescas. Sale la imagen en los billetes de 50 soles. La gente alquila tablas de snowboard para bajar la dunas. Si mañana me hago en valiente lo pruebo. No creo que me parta los piños, porque no hay ni una piedra, jeje.
También van con "buguis" o como se escriba. Yo lo escribo así, como suena, que para eso soy castellano y de Valladolid, jeje. Los coches estos son caros, y encima tu no conduces, así que nada, descartado, que quiero hacer muchas cosas y la plata vuela.
Ahora voy a descansar. Estoy alojado en un sitio muy chulo, solo que comparto habitación con... ¡18 personas! A cambio tengo piscina y estoy en un paraiso, por 10 soles la noche, tampoco vamos a exigir. Mañana sigo con la visitas.

25 septiembre 2006

Pisco, tierra de licor

Ya estoy en Pisco. Llegué por la mañana despues de 3 horas y media en un bus de lujo. Estoy 240 km. de Lima aproximadamente. Esto es bastante desértico, con algún valle fértil. Pisco da nombre a la bebida nacional, el pisco, puro aguardiente de muchos grados. El cóctel más conocido es el pisco sour (lo pronuncian sauer). Apenas he paseado por la ciudad, estoy un poco descolocado, pero esta tarde lo veré todo mejor. Aquí no hay un solo edificio alto, son todo pisos bajos como mucho de 2 alturas o máximo 3, pero esto ya es raro. La ciudad no tiene mucho que ver, más bien es un alto en el camino, casi obligatorio para ir a Paracas, pues allí es mas dificil alojarse. Yo estoy en un lugar que me aconsejaron en Lima. Esta muy bien, tengo mi habitación con baño privado y TV, aunque no es céntrico. Pero llego a la plaza en 5 minutos, no más. No es hotel, es una casa, y pago 2,50€.
He contratado la excursión para mañana a Islas Ballestas y península Paracas, así que genial, 2 cosas en el mismo paquete. La voy a gozar. Hoy descansaré para madrugar mañana.

Mercados de artesanias y despedidas

Ya voy despidiendome de Lima, la gran ciudad. Estoy triste a la vez que ilusionado por salir hacia el sur, ya esta vez sin compañia ni apoyos. Hoy he dado un paseo por la mañana, he comido en la calle de las pizzas, muy popular aqui en Miraflores, y luego he estado con Fiore en mercados de artesanias, y me quer{ia comprar todo, jeje. Pero no compre nada, pues no quiero ir cargando un mes con recuerdos. Lo dejo para ultima hora, y prefiero comprar las cosas tipicas en su lugar de origen. Pero habia cosas preciosas. Todo lo imaginable: tejidos, ropas, figuras de todos los materiales, joyas... pero un mercado que te puedes volver loco de grande que es. Aqui todo a lo bestia.
Hemos dado un paseo alrededor de la Huaca Pullcana, que es una ruina prehispanica enorme, como varios campos de futbol, y que se eleva como 10 o 15 metros sobre los tejados. Es increible ver millones y millones de adobes unos sobre otros. No llego a imaginar el trabajo, las personas, los años que llevo hacer eso.
El resto de la tarde fue de paseo tranquilo, pues el Museo de la Nacion cierra demasiado pronto, y no daba tiempo a visitarlo. Tomamos un cafe y ultimamos detalles. He camabiado mas dinero a moneda peruana para llevarlo conmigo, he reservado plaza en el bus en la parte derecha, para ir viendo la costa... pequeños trucos que son importantes. Mañana salgo a las 7:30 hacia Pisco. Son unas 3 horas creo, pero entre ir a la estacion y demas, pues te lias como 4 o 5 horas hasta que llegas y te instalas. Por alli anda el judio roncador, asi que espero no encontrarme con el, jaja. Ya seria mala suerte.
Y nada mas, me despedi de Fiore y de esta ciudad, pero por poco tiempo, pues Fiore seguro que se viene hasta Arequipa cuando yo este alla, asiq ue nos encontraremos, y Lima no se movera del sitio (espero, porque aqui hay terremotos), y la volvere a visitar a mi vuelta.

24 septiembre 2006

Museos y fiesta

Hoy me he despertado eufórico, aunque mis companeros de habitación no hacen más que molestar, pero tengo tan buen sabor de boca del día de ayer, que me da igual. Al amanecer me di un buen paseo por Miraflores hasta la hora de comer. Me encontraba mal, con dolor de cabeza. Por suerte se me pasó, porque Fiore me invitó a comer a su casa, y no me lo quería perder, aparte que sería quedar mal. Así que una vez recuperado compré una botella de vino español y quedé con ella, y fuimos en combi a su barrio, Pueblo Libre, que nombre más guapo. Su madre había preparado el plato típico del Perú: Ceviche, que es pescado crudo preparado horas antes de consumirlo con limón, cebolla, ají... una serie de condimentos que hace que esté buenísimo. Ya me lo habían comentado, pero hasta que no se prueba... Me encantó, seguro que repito en cuanto pueda.
Después de comer fuimos a visitar el Museo Antropológico, que es una pasada. Me lo recomendó Carolina, y fué un buen consejo. Me encontré con cerámicas, tejidos y momias que conozco desde hace años por libros, pero tenerlo frente a ti es una sensación indescriptible. Además podía hacer fotos, así que me cansé, jeje, parecía un japones de esos... Tanto disfrute y tanto recrearme, se nos hizo tarde, cerraban el museo y no lo terminamos, pero vimos la mayor parte.
Luego quedamos con una amiga de Fiore. No me atrevo a escribir su nombre, que es muy dificil, jeje. Una tía majísima, muy divertida. Así que fuimos a tomar, que se dice aquí. El pisco es la bebida nacional, es como el orujo o muy parecido, y pega que te cagas, por eso lo tomamos mezclado con gaseosa, limón exprimido, una especia de granadina, y un tipo de jarabe dulce, y hielo. Estaba muy rico. Te pides media botella y te la trincas charlando. El pisco tiene 42 grados, así que el primer día no conviene hacerse el valiente, no sea que no te levantes o te tengan que llevar a casa a la media hora con un cebollón.
A la noche fuimos a Barranco a seguir la fiesta. ¡Qué gozada! Es un barrio al sur de Miraflores, bohemio y muy animado por las noches, al menos el sábado. Muchos bares y discotecas, todo lleno de gente. Dimos un paseo para conocerlo, y está en una situación privilegiada, con vistas al mar en un sitio precioso. Hacía algo de frío, sobre todo esa humedad que se te mete en los huesos y te hace ir encojido, así que entramos a un pub con música criolla en directo, de lo mejor desde que he llegado. Me lo pasé genial. Nos tomamos nuestra media botella de pisco y vimos la actuación. Yo me quedaba tonto mirando a la percusión... algunos amigos fliparían, y me acordaba de ellos. La voz la pone gente morocha que dicen aquí, que son mulatos. Es espectacular, gente especial, muy cálida, muy animada... ¡hay que verlo! La conversación fué animada y se pasó el tiempo volando, así que nos fuimos a dormir. He descansado muy bien, aunque menos de lo que me gustaría, pero bueno, mañana me libro de los judios y seguiré mi camino, a ser posible sin compartir habitación.

23 septiembre 2006

El centro de la ciudad

Hoy he visitado el centro de la ciudad, la zona más antigua y el origen de lo que hoy es esta gran urbe. Fuí con Carolina y Bea, dos periodistas españolas que viven aquí. El centro esta lejos de donde me alojo, pero en taxi no se tarda mucho por una via expresa. Fuimos a la plaza de san Martín, y de allí a la plaza de Armas por el Jirón, que es peatonal y está repleto de tiendas y gente ofreciéndote publicidad, tatuajes, internet... de todo. Es un poco agobiante, y además apenas había extranjeros por allí. Pero todo bien. La plaza de Armas es como una plaza mayor donde se encuentra la Catedral, el obispado y el Palacio del Gobierno. Todos estos edificios son preciosos. Más tarde visitamos el convento de San Francisco, que me gustó bastante, y cuyo mayor atractivo para los morbosos son unas catacumbas repletas de fémures, tibias y calaveras. Es un lugar que acojona un poco, pero hay que ver de todo en esta vida. El resto del convento es muy rico, con muchas obras de artistas importantes como Zurbarán o Alonso Cano. Además destacaban los artesonados de madera de estilo mudejar, con mucho trabajo.
A la hora de comer fuimos al barrio chino, y es alucinante. Habia una calle llena de baldosas rojizas, y en cada una de ellas habia labrado un acontecimiento de una familia: bodas, bautizos... cosas asi, con nombres y fecha. Una pasada, y una calle grande, eh. Comimos en un chifa, que es un restaurante chino, solo que se fusionan platos chinos y peruanos, y el resultado es riquísimo. Todo estaba de lujo, y el sitio bastante bien, incluso me dijeron que había una actriz famosa, que era bastante guapa.
Después dimos una vuelta por una zona de mercados y tiendas, y llegamos al Palacio de Torre-Tagle. ¡Cuantas ganas tenía de verlo! La pena es que no se puede entrar, ya que había 3 gorilas enormes en la puerta. Es el Ministerio de Asuntos Exteriores, asi que eso, solo desde el exterior, jeje. Pero muy bonito, tiene unos balcones enormes de madera y trabajados con relieves, una pasada, de lo mejor que he visto en madera.
Y se nos acabo en tiempo, que yo estoy de vacaciones, pero las chicas tenían que trabajar, así que volvimos a Miraflores y nos despedimos, aunque quizás esta noche tomemos unas chelas (cervezas) juntos en el barrio de Barranco, al sur de la ciudad.
Me ha gustado mucho esta visita. Me deja todo alucinado, siempre voy mirando alrededor. En lo que llaman via expresa el cesped de los lados esta decorado con flores, pero van formando letras que suelen ser mensajes para el ciudadano, o bien publicidad. "Timofónica", pero en vez de un luminoso, aquí lo hacen con flores, más ecológico y mucho mas bonito. Esto es una cosa muy curiosa.
Sigo sin ver esos peligros que advierten en guías y demás. Hay mucha policia, sobre todo en lugares frecuentados por turistas. Si que ves cosas chungas, como niños pidiendo o vendiendo caramelos con 6 años. Es jodido verlo, pero no puedes ayudar a mil, asi que tienes que pasar un poco de largo. Es algo que molesta, ver estas cosas y al lado edificios enormes, de ricos, y ejecutivos con trajes elegantes. Son los contrastes de esta y otras muchas ciudades en el mundo.

22 septiembre 2006

más Lima

Ayer fué el primer día, y aunque intenso, me lo tomé con calma. Me tenia que adaptar a la ciudad, a la gente... a todo. Pero he tenido mucha suerte con los contactos. Fiore y Carolina me han tratado muy bien, asi que estoy encantado. Ayer comí por primera vez aquí, y puedo decir que esta todo riquísimo, y barato. Por 1,25€ me cansé de comer.
Después di una vuelta solo para hacer tiempo y bajar tripa... Me senté en la plaza Kenedy, que es muy transitada, donde hay limpiazapatos y cosas así. Allí conocí a un chaval de aqui que tenía familia en España, y estuvimos charlando. Al final me quería vender pulseras.
Luego llegó Carolina, la periodista española que lleva 3 años aquí, y está encantada de la vida. Ya es una más entre los millones de habitantes. Es una chica muy agradable, tanto como mi amigo Alberto, que fué quién me permitió conocerla. Me habló sobre actualidad peruana y muchos otros temas. Dimos un buen paseo y tomamos un café. Luego me acompañó al hostal, pero hemos vuelto a quedar hoy, pues trabaja en el centro de Lima y lo conoce muy bien, y como tiene el día libre se ha ofrecido a guiarme... ¡qué "suertudo" soy!
Más tarde me quedé hablando con mis compañeros de habitación, dos israelis. El que ronca es Matán, y lleva 8 meses viajando solo por Sudamérica. El otro es Shai, y lleva 6 meses solo. Lo mío al lado de esto es una mariconada, jaja.
Luego vino Fiore a buscarme y me enseñó San Isidro, el distrito más "pijo" de Lima, donde la gente tiene pasta. Hay un parque precioso lleno de olivos. Ya era de noche, pero el cielo aqui es como blanco, no se muy bien como describirlo. Parece que no es de noche del todo.
Por cierto, que para ir a San Isidro monté por primera vez en "combi". Tienes que ser rápido al subir y bajar, y dentro con cuidado, porque de un frenazo casi me dejo los dientes en el parabrisas, y eso que iba a la mitad de la furgoneta, jeje.
Y nada más, al fin me metí a descansar. Les dije a los israelís que me iba a dormir y fueron muy respetuosos conmigo. No me han molestado nada, o es que estaba yo tan roto que ni me he enterado. El caso es que he dormido como un marqués, y ahora me iré a conocer el centro de Lima, y a dar caña a la cámara de fotos. Ya me siento muy bien por las calles. Creo que me estoy acostumbrando al ritmo y todo eso.

21 septiembre 2006

¡Lima... al fin!

Después de 12 horas en un avión, llegué a Lima. Aún de noche, tuve que esperar el equipaje y pasar un control de aduana. Finalmente salí, y me esperaba Fiore. Y menos mal, porque si llego a estar solo... Es un agobio, todos los taxistas quieren llevarte y te comen la oreja durante unos metros. Tienes que hacer como que eres sordo para que al cabo de unos segundos te dejen en paz. Curioso método de conseguir clientes. Si sales del aeropuerto, consigues taxis a mitad de precio, eso si, no siempre seguros. Por 16 soles me llevó a "La casa del mochilero", mi alojamiento en Lima, sencillo y compartiendo cuarto (como ronca el colega...)

En mi primer paseo en solitario estoy algo perdido. Esto para mi es un caos. No me gustan las grandes ciudades y esto tiene 8 millones de habitantes. Los taxis y los combis no hacen mas que pitarte para llevarte. Los combis son furgonetas tipo Vanette, petadas de gente, y con un tío que lleva medio cuerpo fuera diciendo donde va para que subas. La conducción es agresiva, ya me gustaría ver aquí a Fernando Alonso, a ver si se ponía chulito, jaja. Para cruzar una calle en hora punta... con 100 ojos o te la juegas. Así que yo bien concentrado.
He estado viendo el Océano Pacífico, un bonito nombre para un mar, pero que también ha tenido sus guerras. Es inmenso, y Lima esta sobre un acantilado de unos 40 metros sobre él. El cielo es gris, esta muy cubierto, pero hace bueno, aunque la gente va abrigada como en invierno.

Aún me quedan muchas cosas por descubrir, ahora estoy descolocado y sin dormir. Por suerte estoy en la mejor zona de Lima, así que estoy tranquilo. Hay edificios grandes de viviendas, pero la mayoría de casas que vi desde aeropuerto a Miraflores eran de una o dos alturas. Hay mucha publicidad por las calles, comercios de todo tipo... son miles de cosas y sensaciones difíciles de expresar así en un momento, así que ya seguiré contando mis aventuras por estas tierras peruanas...

17 septiembre 2006

Ruta por el sur de Perú

Esta es la ruta que voy a seguir en mi aventura en solitario por Perú. Quizás pueda variar algo sobre la marcha, pero por estos lugares seguro que voy a pasar. Ya ha comenzado la cuenta atrás y estoy impaciente... Posted by Picasa

08 septiembre 2006

Viaje a Perú

Cuando era pequeño flipaba viendo las fotos de las ruinas incas, aquellos lugares fascinantes como Machu Picchu me despertaban un gran interés. Con el tiempo terminé estudiando Historia del Arte, y seguí soñando con que algún día pudiese visitar esos lugares. Pero siempre me ha faltado valentía para embarcarme en viajes lejanos, muchas veces también por falta de tiempo o dinero.
 
Esta vez va en serio, ha llegado el momento, y dentro de unos días vuelo con destino Lima. Ya estoy impaciente y nervioso. Los planes se me confunden unos con otros, pero tengo bastante clara la ruta a seguir, partiendo de Lima, seguiré hacia el sur por la costa, hasta Pisco y Paracas, visitando las Islas Ballestas, luego Ica y el desierto, con el oasis de Huancachina, y más tarde Nazca y sus enigmáticas figuras, solo visibles desde el aire. Después bajaré hasta Arequipa para ver el volcán El Misti, y seguiré hasta el cañón del Colca, el segundo más profundo del mundo, donde quizás con suerte vea el condor. Más tarde subiré hasta los 4000 metros hacia Puno y el lago Titicaca, donde navegaré y visitaré las islas flotantes de los Uros. Por último y como gran despedida, llegaré a Cuzco, ciudad sagrada por los incas, y la más antigua de toda América. Allí pasaré unos días visitando lugares preciosos, y el culmen será llegar a Machu Picchu.
 
Este es el plan. En un mes no tengo que tener problemas, hay quien lo hace en menos tiempo, pero no me gusta ir corriendo. Prefiero disfrutar cada segundo en cada lugar a estar agobiado por querer ver demasiado. Si todo sale bien ya tengo muchos años por delante para regresar a ver lo que me quede pendiente, como la selva.
 
En este blog intentaré escribir desde Perú siempre que pueda para que mi gente pueda seguir un poco la aventura. Voy con poca pasta pero mucha ilusión... ¡nos vemos!

12 julio 2006

Viaje en proyecto

Hace tiempo que sueño con hacer un viaje importante, de esos que se recuerdan toda la vida. En los últimos meses elegí para ese viaje un destino interesante: Perú. Su pasado inca, su variedad, y sobre todo, las ruinas de Machu Picchu son los factores que más me atraen.
Poco a poco he ido aprendiendo cosas sobre el pais, tanto en internet como con una guía de Lonely Planet que me ha hecho aprender muchísimo. Tambien he conocido gente gracias a internet que siempre esta dispuesta a ayudar (mil gracias).
Ahora veo que se acerca el momento en que tengo que decidirme. Siempre he tenido miedo de hacer cosas de este tipo, y ya es hora de "soltarse". Ya tengo la fecha más o menos situada, y tan solo me faltan unas gestiones para tener todo aclarado y embarcarme en la aventura hasta el momento mas osada de mi vida, pues iría solo.
Espero que este sea el principio de una historia inolvidable, y que pueda contarla aqui.