23 septiembre 2006

El centro de la ciudad

Hoy he visitado el centro de la ciudad, la zona más antigua y el origen de lo que hoy es esta gran urbe. Fuí con Carolina y Bea, dos periodistas españolas que viven aquí. El centro esta lejos de donde me alojo, pero en taxi no se tarda mucho por una via expresa. Fuimos a la plaza de san Martín, y de allí a la plaza de Armas por el Jirón, que es peatonal y está repleto de tiendas y gente ofreciéndote publicidad, tatuajes, internet... de todo. Es un poco agobiante, y además apenas había extranjeros por allí. Pero todo bien. La plaza de Armas es como una plaza mayor donde se encuentra la Catedral, el obispado y el Palacio del Gobierno. Todos estos edificios son preciosos. Más tarde visitamos el convento de San Francisco, que me gustó bastante, y cuyo mayor atractivo para los morbosos son unas catacumbas repletas de fémures, tibias y calaveras. Es un lugar que acojona un poco, pero hay que ver de todo en esta vida. El resto del convento es muy rico, con muchas obras de artistas importantes como Zurbarán o Alonso Cano. Además destacaban los artesonados de madera de estilo mudejar, con mucho trabajo.
A la hora de comer fuimos al barrio chino, y es alucinante. Habia una calle llena de baldosas rojizas, y en cada una de ellas habia labrado un acontecimiento de una familia: bodas, bautizos... cosas asi, con nombres y fecha. Una pasada, y una calle grande, eh. Comimos en un chifa, que es un restaurante chino, solo que se fusionan platos chinos y peruanos, y el resultado es riquísimo. Todo estaba de lujo, y el sitio bastante bien, incluso me dijeron que había una actriz famosa, que era bastante guapa.
Después dimos una vuelta por una zona de mercados y tiendas, y llegamos al Palacio de Torre-Tagle. ¡Cuantas ganas tenía de verlo! La pena es que no se puede entrar, ya que había 3 gorilas enormes en la puerta. Es el Ministerio de Asuntos Exteriores, asi que eso, solo desde el exterior, jeje. Pero muy bonito, tiene unos balcones enormes de madera y trabajados con relieves, una pasada, de lo mejor que he visto en madera.
Y se nos acabo en tiempo, que yo estoy de vacaciones, pero las chicas tenían que trabajar, así que volvimos a Miraflores y nos despedimos, aunque quizás esta noche tomemos unas chelas (cervezas) juntos en el barrio de Barranco, al sur de la ciudad.
Me ha gustado mucho esta visita. Me deja todo alucinado, siempre voy mirando alrededor. En lo que llaman via expresa el cesped de los lados esta decorado con flores, pero van formando letras que suelen ser mensajes para el ciudadano, o bien publicidad. "Timofónica", pero en vez de un luminoso, aquí lo hacen con flores, más ecológico y mucho mas bonito. Esto es una cosa muy curiosa.
Sigo sin ver esos peligros que advierten en guías y demás. Hay mucha policia, sobre todo en lugares frecuentados por turistas. Si que ves cosas chungas, como niños pidiendo o vendiendo caramelos con 6 años. Es jodido verlo, pero no puedes ayudar a mil, asi que tienes que pasar un poco de largo. Es algo que molesta, ver estas cosas y al lado edificios enormes, de ricos, y ejecutivos con trajes elegantes. Son los contrastes de esta y otras muchas ciudades en el mundo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Que pasa tu. Como te lo montas tío, llegas a un país sin tener mucha idea de que se cuece por allí y al final terminarás cambiándolo por completo. No pudimos despedirnos como se merece pero bueno ya sabes con el curre no sé ni en que día ando. Pues nada tío, me gusta leer de tus andanzas por el mundo peruanístico y sobre todo dales caña que sepan quien eres y de donde vienes. Disfruta mucho y aprovecha el momento que es toda una experiencia (y no religiosa precisamente)
Ánimo y un abrazo majete

Anónimo dijo...

ke paso wey!!!!!! flipote de sitio, seguro que los peruanos andan por alla tol rato (mas que nada porque no les kedan mas cojones, no?)y no se percatan ni de la mitad de los detalles que tu has pillao en unos dias. Mudejar en Perú? ver para creer, si bien son una degradacion de la noble raza hipánica, han heredado el buen gusto, jajajajaja. En fin, andate con cuidao haber si voy a tener que ir a dar dos ostias a alguien,estate al ojo con las periodistas esas y un par de collejas pa los judios. Un abrazo men, El Puto Gonza.