San Miguel de Tucumán

Tras una noche en bus, donde conseguí dormir bastante bien ( y mira que es dificil) llegué a San Miguel de Tucumán. El día estaba lluvioso y era de agradecer, porque llevo dos semanas pasando muchísimo calor en esta zona del interior de Argentina, con temperaturas superiores a 35º casi todos los días.

Plaza de la Independencia

Fuí directo a la oficina de información turística, donde me atendieron estupendamente e incluso me buscaron alojamiento. He pasado los dos últimos días del año en un albergue bastante decente. El primer día me dediqué a conocer un poco la ciudad, aunque la lluvia no me dejó disfrutar mucho, y los museos estaban cerrados en estos días navideños. Eso si, las calles estaban llenas de gente haciendo las últimas compras antes de que finalizase el año.

Casa del Gobierno

El día de Nochevieja fue soleado, y si que pude disfrutar de las calles de Tucumán en todo su esplendor. Es una ciudad de más de un millón de habitantes, situada en un lugar estratégico para el comercio, cercano a Bolivia, así que su economía parece bastante fuerte. A mi me ha causado muy buena impresión.

Casa donde se firmó la declaracion de Independencia argentina.

En sus calles se pueden ver edificios antiguos bien conservados y restaurados. Hay unas cuentas iglesias muy vistosas, y en la plaza de la Independencia se encuentra la Catedral, de estilo neoclásico, y con muy buena iluminación nocturna.

Catedral de Tucumán

Quizás el edificio más espectacular es la casa del Gobierno, también con una iluminación preciosa por la noche. Pero el edificio más importante es la Casa de la Independencia, donde en 1816 se proclamó la declaración de independencia de lo que hoy es la República Argentina. Así que los tucumanos se sienten muy orgullosos de su importancia histórica.

Detalle de la Catedral

Estos días he estado muy tranquilo, resolviendo algunos asuntos importantes, sobre todo el tema de las fotografías, que ya tengo todas las tarjetas de memoria ocupadas, y necesitaba grabar unos DVDs. No es facil encontrar un sitio fiable, y mucho menos rápido, así que perdí una mañana en conseguirlo...

Por la noche me quede en el albergue, donde organizaron una parrillada para despedir el año. Era el único que estaba solo, pero al sentarme en la mesa todo fue bastante sencillo, entre una pareja de irlandeses, otra de franceses, y muchos argentinos. Al poco tiempo ya me sentía como en casa, y después de cenar brindé con 17 desconocidos como si lo estuviera haciendo con mi familia, jeje. Estoy viviendo unas situaciones muy extrañas estos días, pero son todas experiencias que recordaré para siempre.

Iglesia de la Merced

Tuve la suerte de conocer a dos profesores de historia y dos profesoras de filosofía, así que no hubo fiesta, pero si unas buenas clases de historia y economía argentina, jeje. Hasta las 5 de la noche nada menos. Lo pasé muy bien, y me hicieron sentir como en casa.

Hoy, día de Año Nuevo, está todo cerrado en la ciudad. Hace mucho calor, y he dedicado el día a pasear y estar tranquilo. Tampoco se puede hacer mucho más... Me he estado informando y planeando para encontrar un buen lugar para ver el Rally Dakar, que llega a Tucumán el día 3 de Enero. Pero en la ciudad no hay competición, así que he comprado un billete hacia un pueblo llamado Amaicha del Valle, en donde si que hay un tramo cronometrado. Espero que merezca la pena, porque he cambiado un poco mis planes por este asunto del Dakar. Ya lo contaré en la próxima entrada.

Casa del Gobierno la última noche de 2010.