Oruro

Escribo esta entrada porque acostumbro a escribir sobre todos los lugares que visito, pero sobre Oruro no puedo contar mucho, ya que de cuatro días que he estado, los cuatro ha llovido mucho, y apenas he podido estar en la calle. Por desgracia la oferta de ocio en Oruro es muy limitada, casi inexistente. El motivo de mi visita era ver los Carnavales, que se celebrarán a primeros de Marzo, pero semanas antes ya comienzan las celebraciones.

Monumento a los mineros

La lluvia arruinó todo esto, así que pasé los cuatro días refugiado en el hotel, en los ciber navegando por internet, e investigando sobre una nueva afición que comencé en Sucre: la numismática. Ya tengo una buena colección de monedas y billetes antiguos bolivianos, no tanto como me gustaría, porque las monedas buenas, que son esas que roban del mar algunos ricachones americanos, resultan carísimas. Pero es divertido comprar monedas y billetes baratos en los mercados, se puede regatear y ajustar un poco más el precio, y es entretenido, sobre todo cuanto estas aburrido y no hay otra cosa que hacer.

El tercer día en Oruro el sol hizo un intento por asomar, y aproveché para subir al mirador de la Virgen del Socavón, desde donde hay unas vistas bastante buenas de la ciudad, los cerros, y a lo lejos el lago Uru Uru, que dió nombre a los indígenas de la zona y más tarde a la ciudad de Oruro.

Vista de Oruro desde el mirador

Las calles, que a muchas horas parecían ríos, estaban llenas de gente a pesar de la lluvia. Además hubo una gran manifestación del sindicato de transporte, y paralizaron la ciudad, así que la gente tenía que ir caminando obligatoriamente, pues no había taxis ni buses.

En Bolivia la gente en la calle está muy descontenta, y protesta mucho. El gobierno ha realizado unos ajustes y hay mucha gente disconforme. El precio del azucar y otros alimentos básicos ha subido muchísimo, e incluso falta en las tiendas, y hay graves problemas de abastecimiento. Así que la gente está enfadada, y hay muchas manifestaciones y protestas. La que he visto en Oruro ha sido la más grande hasta ahora, pero en Cochabamba también las hubo, y se cortaron algunas carreteras.

Ese mismo día, en la tarde, el presidente de Bolivia, Evo Morales, llegó a la ciudad para celebrar el aniversario de la creación del departamento de Oruro, de donde es el presidente, y que era al día siguiente. Hubo un despliegue de seguridad impresionante, llenándose las calles de policias y militares fuertemente armados. Yo nunca había visto tantas armas en mi vida, y sinceramente me daba un poco de miedo. Pero aún así fuí a ver a Evo, y lo conseguí, aunque fue todo tan rápido que no pude ni hacerle una foto decente.

Ejército de Bolivia

Guardia boliviano

Al día siguiente era festivo en la ciudad, pero estaba muy gris y lluvioso. Estaba un poco desesperado, pues era el cuarto día seguido que iba a perder, así que fui a la estación a informarme para viajar a La Paz, y regresé al hotel a por mis cosas, y me fuí de Oruro, de manera un poco precipitada, pero pensando que era lo mejor. Por el camino observé que adelantaron al bus muchos coches de policía, y algunos blindados. Era el presidente y su escolta, que por lo visto también tuvieron que abandonar Oruro de forma precipitada, porque la gente se calentó, y la cosa se puso fea...

Ahora estoy en La Paz, y aunque sigue lloviendo, es la capital, y tiene mucho que ver. He podido contar hasta 28 museos diferentes. Aún así, en estos días quizás tengo que replantearme muchas cosas, porque la previsión del tiempo no es buena, hay alerta por fuertes lluvias, hay zonas con problemas y carreteras intransitables, y no quiero meterme en problemas, así que quizás tengo que buscar una zona libre de lluvias, y eso es bastante lejos de aquí. En los próximos días disfrutaré de La Paz mientras decido mi próximo destino. Se admiten sugerencias.